Cada día son más las personas que quieren vivir la vida con plenitud y al máximo exponente pero cada vez se hace más difícil estar a tope de energía y de salud para poder hacerlo.

Nuestro estilo de vida está cambiando radicalmente  y existe cierta resignación respecto a esto en gran parte de la población, como si solo por tener determinada edad esta aceptado estar cansados, envejecidos y con ese “cuerpo escombro” que hasta hace poco nos parecía irreverente.

Esta forma de vivir como si fuéramos eternos y dando por hecho que las cosas importantes de la vida como tener salud y vitalidad es algo “normal”, es algo que me escalofría.

Sin embargo si eres de esos que te gusta sentirte como niño, enérgico, vital, volar como el viento y verte cada día más joven este artículo es para ti.

Alguna vez te cuesta terminar el día con vitalidad?

Sientes que has envejecido muy rápido?

• CONTENIDOS
• Los 8 factores más frecuentes por los que nos falta energía.
• La energía, el motor de tu vida.
• ¿Por dónde empiezo?
  • 5 Tips para incrementar tu energía.
    • Come alimentos de alta vibración.
    • Come con consciencia
    • Basa el 80% en alimentos alcalinos.
    • Apuesta por lo vegetal
    • No te intoxiques.
    • Bebe más agua.

Si has respondido que sí, sigue leyendo y descubrirás las claves que te permitirán mejorar en todo esto.

Si los resultados que tienes en tu vida no te gustan, tendrás que replantearte hacer un cambio en tu mentalidad y hacer las cosas de forma diferente. 

                Eso fue lo que me ocurrió a mí, me había cuidado siempre, alimentación sana,  agua, ejercicio, vida saludable, … sin embargo, los resultados no eran los que yo quería en algunos sentidos, no me sentía a gusto con mi cuerpo, a nada que dejaba de hacer ejercicio engordaba con facilidad y cada vez me sentía más frustrada. Me di cuenta que tenía creencias erróneas sobre todo lo que siempre considere como verdad, todo lo que siempre escuché o me enseñaron, y tuve que replantearme nuevas formas de pensar en cuanto a la nutrición, los hábitos y el ejercicio físico.

¿Ya no sientes tu cuerpo como antes?

 ¿A veces te has visto con apatía frente a la vida y no sabes por qué?

LOS 8 FACTORES MÁS FRECUENTES QUE NOS ROBAN ENERGÍA:

• Pensamientos negativos y creencias limitantes
  • Nuestros pensamientos son órdenes para nuestro cuerpo y tienen el potencial de cumplirse. Pensamientos negativos dan lugar a resultados negativos

• Inestabilidad emocional:
  • Las personas equilibradas emocionalmente tienen más energía que las que sufren cambios drásticos en su estado de  ánimo.
• Sedentarismo
• Deshidratación 
• Alimentación con escaso valor nutricional.
• Intoxicación.
• Estrés.

LA ENERGÍA, EL MOTOR DE TU VIDA

Para entender cómo funciona el cuerpo humano y todo lo que existe en la naturaleza es necesario hablar de energía, pues en última instancia todo en este universo, incluidos nosotros, es energía.

                Cuando no hay energía, no hay vida y eso nos ocurre a nosotros también, cuanta más energía tenemos mejor y más saludables estamos, en cambio, por debajo de ciertos niveles de energía aparecen señales de enfermedades y poca salud.

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La física es sólo una de las manifestaciones de energía pero las personas además somos mente, emoción y espíritu.

Si quieres disfrutar del cuerpo que siempre soñaste, levantarte llena de energía y con ganas de comerte el mundo, o sentir que los años no pasan por ti debes poner el foco en cuidar y subir le energía en los 4 planos de la persona:

• Pensamientos
• Emociones
• Energía vital
• Plenitud espiritual.

Todos los planos están interconectados y se retroalimentan entre si y cualquier cambio personal viene precedido de una mejora en nuestra mentalidad.

Como dice la canción: salud, dinero y amor! y yo estoy de acuerdo totalmente en que para empezar a mejorar nuestra vida debemos empezar por el principio: la energía de la salud y el cuerpo físico.

¿Qué es tener energía en el plano de la salud?

El cuerpo nos habla y debemos aprender a escucharle

Entendemos energía vital por: la sensación de levantarte con vitalidad y rebosante de vida, tener buen humor, apetito, pasión por la vida, equilibrio emocional y en definitiva sentir que cada día estás en tu mejor momento.

Una de los aspectos de nuestra vida que más energía nos roba es la comida que damos cada día a nuestro cuerpo.

En el momento en el que un alimento entra en la boca empieza a formar parte de nosotros y con él nos construimos o nos desgastamos, por eso es importante elegir de forma consciente de qué materia prima queremos edificar nuestro cuerpo. 

  Asociados a la alimentación hay grandes mitos en el subconsciente colectivo. Empresas alimenticias, medios de comunicación, farmacéuticas etc… muchos intermediarios que manipulan información que recibimos y muchos intereses ocultos en que se siga fomentando este estilo de vida de total ignorancia en cuanto a la alimentación y el estilo de vida actual, pero yo creo que es una cuestión de ser tu quien decide la información a la que te expones y te haces parte consciente de lo que entra en tu cuerpo tanto si está socialmente aceptado como si no.

El cuerpo tiene como misión:

• Mantenerse en estado de equilibrio
• Renovarse cada día
• Mantenerse muy limpio mental y físicamente
• Obedecer las órdenes de la mente para que ambos, mente y cuerpo estén alineados.

Por tanto, cualquier desorden corporal puede tener origen en un pensamiento, alguna emoción no resulta, sentimientos de infelicidad, malas relaciones, traumas o episodios de nuestra infancia etc. y normalmente las consecuencias de todo esto son  aparte de las físicas como la falta de energía o el sobrepeso otras que afectan a todas las esferas de la persona.

Cuando hablamos de lo eminentemente físico el origen tiene que ver fundamentalmente con 4 causas:

• Sequía corporal
• Intoxicación, tanto con pensamientos como con alimentos, fármacos, drogas socialmente aceptadas como café, tabaco o alcohol…
• Desnutrición por carencia de nutrientes en la comida y muerte celular.
• Pensamientos tóxicos y desequilibrio emocional. 

Cuando esto ocurre de forma repetida nuestro cuerpo activa ciertos mecanismos de defensa que aún agotan más al organismo, y aparecen las primeras señales de desnutrición o intoxicación:

• Cansancio y falta de energía.
• Desánimo
• Dolores de cabeza
• Inflamación, retención de líquidos o hinchazón abdominal…
• Desequilibrios hormonales
• Envejecimiento y muerte celular
• Malas digestiones
• Sobrepeso
• Dolores musculares

El cansancio y la falta de vitalidad al afrontar el día solo son señales que te da tu cuerpo de que hay aspectos que tienes que mejorar y para eso, cualquier mejora conlleva además  una forma diferente de pensar.

Nuestro trabajo consiste en este sentido en mantener nuestra energía lo más alta posible el máximo tiempo posible.

Todo lo que hacemos, pensamos, decimos y sentimos, en los 4 planos, tiene una carga energética por lo tanto influye y afecta a todo lo demás. No vivir en total congruencia con respecto a esto nos roba muchísima energía y es fuente de enfermedades.

POR DÓNDE EMPIEZO: TU CUERPO, TU TEMPLO

Crees que tu cuerpo podría estar lleno de vida tomando alimentos  de  baja vibración?

Para tener resultados diferentes tienes que empezar por cuidar de tu salud física y emocional, lo mismo que alimentas tu mente con buenos pensamientos, comenzar a cuidar tu alimentación con buenos alimentos.

Puedes comenzar con hábitos distintos a los que haces ahora y para ello te propongo algunos de ellos.

5 TIPS PARA INCREMENTAR TU ENERGÍA VITAL CON LA ALIMENTACIÓN

1. Come alimentos de alta vibración.

Para que los alimentos cumplan su función, lo ideal sería que al comerlos nos llenaran de energía para regenerar nuestras células correctamente, sin embargo, muchos de ellos por cómo están elaborados lo que hacen es bajar mucho nuestra frecuencia vibratoria, y nos vamos quedando literalmente cada vez con menos vida. De lo que se trata es de tomar alimentos vivos, lo más crudos y menos procesados y más natural posible.

• Alimentos de baja vibración: ensucian el cuerpo, contienen pocos nutrientes y llenan de toxinas el sistema digestivo:
  • Fritos
  • Animales muertos. La carne roja es la que más baja vibración tiene.
    • Al comer carne muerta fomentas también ciertos comportamientos relacionados con los instintos, la supervivencia, miedo, violencia…
  • Lácteos, el consumo de lácteos favorece la pérdida de vida intestinal. 
  • Conservas y embutidos.
  • Café, alcohol y tabaco
  • Harinas y refinados
  • Alimentos procesados, químicos
  • Alimentos precocidos, la cocción destruye el ADN y por tanto la vida del alimento.
  • Bebidas carbonatadas y azucaradas
  • Bollerías, dulces y azúcares.

Los 5 venenos blancos:

• Sal
• Leche
• Arroz
• Harina
• Azúcar

Come alimentos de alta vibración:

• Frutas, llenas de fitonutrientes
• Alimentos de hojas verdes
• Vegetales con raíces u hortalizas
• Semillas y aceites vegetales.
• Agua pura 

2. Come de forma consciente.

• Conecta con tu cuerpo y tu mente antes de comer. El momento de la comida es un ratito para conectar con tu cuerpo, ser consciente de qué sensaciones tienes y procurar un momento de paz mental sin ese ruido constante
• Asegúrate de que realmente tienes hambre y no sed y que no comes movido por un estado de ánimo que te empuja a comer por ansiedad.
• Disfruta de lo que comes, ponle todo el amor del mundo y bendice los alimentos que van a formar parte de ti.
• Apaga la tele y disfruta del placer del silencio un rato para estar presente al máximo en ese momento.
• Mastica al menos 25 veces cada bocado y saborearlo al máximo.
• Pon amor en lo que cocinas. Puesto que somos energía, transmites la tuya a la receta, un alimento cocinado con amor y lleno de buenos deseos sienta mucho mejor que aquel que está cocinado con ira, enfado o malos sentimientos. 

3.   Lleva una dieta alcalina en un porcentaje de 80 – 20

Para mantenerse vivo y sano, el cuerpo humano debe conservar unas constantes vitales:

• Una es la temperatura: de unos 37 º C.
• El otro es el PH, o potencial de hidrógeno. El pH de la sangre no debe variar de ciertos límites. A este equilibrio se le llama homeostasis.

En nuestro sistema digestivo conviven millones de microbios necesarios para descomponer los dehechos y basura del metabolismo y de la comida. Si el equilibrio acido – alcalino tiende a acidez estos bichitos se transforman en bacterias y si sigue aumentando la acidez se convierten  en hongos y virus donde comienza la juerga de las enfermedades y la falta de energía.

El ph se va cambiando a ácido porque estos residuos, deshechos, células muertas y toxinas se van acumulando en los fluidos y tejidos corporales;  y nuestro sistema linfático, encargado de limpiarlo, esta tan congestionado que no da a vasto con tanto trabajo.

En la escala de PH hay dos polos: el ácido y el alcalino. Si esos parámetros se alteran nuestro organismo no podría vivir. Por eso, el cuerpo tiene que hacer lo imposible para mantener estables esos valores. Ácido 1 al 7 Neutro 7 Alcalino 7 al 14

El organismo es un sistema complejo de equilibrios. Uno de estos equilibrios es químico y se refiere a la acidez o alcalinidad de los fluidos corporales, especialmente de la sangre, el otro es el equilibrio cuerpo – mente.

Un cuerpo alcalino es un cuerpo sano, es aquél que tiene el ph de la sangre no ácido y por lo tanto saludable.

Los alimentos alcalinos se digieren con mayor facilidad, por lo que los nutrientes se aprovechan mejor, lo que conlleva mayor energía y menos inflamación

ALIMENTOS ALCALINOS

• MÁS FRUTA: uva pasa, higo seco, uva negra, plátano, albaricoque, cereza, naranja, limón, manzana.
• VERDURA FRESCA Y DE TEMPORADA: espinaca, brécol y coles y en general, las verduras y vegetales de hoja verde
• HORTALIZAS Y TUBÉRCULOS: apio, zanahoria, calabacín, patata, lechuga, berenjena, tomate, cebolla…
• PROTEINAS VEGETALES: legumbres, semillas, germinados, algas y algún fruto seco. La proteína es necesaria aunque no es, salvo excepciones, lo más alcalinizante.

ALIMENTOS ÁCIDOS

Por lo general resultan acidificantes aquellos alimentos ricos en grasas saturadas, azúcares y harinas refinadas y proteínas de origen animal, como las carnes o lácteos y los productos procesados e industrializados.

El alcohol, café, azúcar refinada, refrescos, carne, pasta, lácteos y almidones  son difíciles de digerir y el sistema digestivo tiene que desgastar mucha energía para hacerlo y genera muchos desechos tóxicos que dañan todo el organismo.

Puede ser importante que procedan de cultivos ecológicos y no de cultivos intensivos con fertilizantes y plaguicidas que alteran el pH del suelo. El cuidado de la agricultura va ligado al cuidado de la salud.

El 90% de las personas llevan un estilo de vida “ácida”

El tipo de alimentación que seguimos afecta a nuestros niveles de acidificación de la sangre pero cuando llevamos un estilo de vida dominado por el estrés, sustancias químicas, pensamientos negativos y nada de deporte nuestro cuerpo tiene que trabajar más para conseguir una condición interna estable. Todos estos factores inciden directamente en nuestro nivel de Ph.

¿QUÉ OCURRE CUANDO NUESTRO CUERPO NO SE MANTIENE ALCALINO?

• Afecciones cardiovasculares
• Aumento de peso, obesidad, y diabetes
• Exceso de carga en los riñones y formación de cálculos
• Desgaste y pérdida de masa muscular
• Inmunodeficiencias
• Desequilibrios hormonales
• Envejecimiento prematuro
• Osteoporosis
• Caries
• Dolor de articulaciones, dolor muscular y gota
• Falta de energía y fatiga crónica
• Digestiones lentas
• Hongos, infecciones y virus
• Tristeza, tendencia a la depresión, nerviosismo e irritabilidad
• Saliva ácida, encías inflamadas y sensibles, alta irritación de las amígdalas y faringitis.

4.   Apuesta por lo vegetal en un 80 – 20

Una dieta rica en alimentos vegetales favorece este equilibrio, mientras que la carne y los productos lácteos lo dificultan, lo que puede llevar al organismo hacia la acidez.

Con la información que hoy en día con la que hoy contamos a este respecto ya se sabe y justifica la apuesta a favor de la alimentación natural y esencialmente vegetariana. Los vegetales y plantas son los que suelen tener más contacto o relación con el sol que es la fuente de energía y de vida por excelencia y los vegetales la toman para hacer su proceso de fotosíntesis.

Algunas razones por las que debes hacer una dieta lo más vegetariana posible:

• Los vegetales son ricos en fibra lo que ayuda al tránsito intestinal
• Son los carbohidratos “buenos” ya que tienen un índice glucémico mucho más bajo que los “malos” con lo que en la mayoría de los casos el azúcar que se absorbe no es necesaria la intervención de la insulina para equilibrarlo en sangre
• Tienen muchas menos calorías
• Aportan vitaminas y minerales necesarios para el inicio de muchas reacciones metabólicas.
• Fitonutrientes, esas sustancias del mundo vegetal en pequeñas cantidades pero imprescindibles para la vida
• Son fuente de energía y combustible para el cuerpo más saludable ya que es una energía mantenida y sin picos de azúcar.
• Poseen mucha cantidad de agua
• Cuando esa posible tomarlos lo más crudo posible y con piel
• Son mucho más limpios a la hora de generar basura en su metabolización.
• Las plantas son seres vivos que nos dan energía al comerlos, al contrario que los animales. Es importante no ingerir cosas en nuestro organismo carentes de vida no solo por la energía que transmiten sino por la cantidad de toxinas que introducimos gratuitamente en nuestro organismo.

5.   No te intoxiques.

Todas las células que componen nuestro organismo necesitan alimentarse, eliminar residuos y renovarse constantemente. En este sentido, la sangre cumple dos funciones vitales:

• Llevar a todas las células el oxígeno y los nutrientes que necesitan
• Retirar de ellas los residuos tóxicos y ácidos que se producen como resultado del metabolismo de dichos nutrientes

Estos residuos tóxicos son evacuados del organismo a través de las vías naturales de eliminación (riñones, intestinos, piel y pulmones). Por lo tanto es imprescindible mantener limpios nuestros “filtros” naturales, ya que si se obstruyen empiezan a surgir problemas. Comienza la Autointoxicación.

Cuando un filtro no está limpio y consecuentemente no puede eliminar los desechos tóxicos, como por ejemplo el ácido úrico, nuestro cuerpo comenzará una batalla para evitar que dichos residuos ácido vayan a parar al torrente sanguíneo y varían el pH de la sangre.

“El envejecimiento y las enfermedades se originan por el efecto combinado de actitudes mentales negativas y temerosas, emociones y una excesiva acumulación de sustancias tóxicas”

Los secretos eternos de la Salud

Un cuerpo intoxicado porque la linfa esta congestionada y llena de “basuras” sanguíneas puede morir en 24 horas.

Dónde están las toxinas??

• Aditivos alimentarios
• Pesticidas y hormonas de los alimentos.
• Contaminación ambiental
• Residuos del metabolismo
• Toxicidad generada por las bacterias que descomponen los alimentos no asimilados.
• Medicación y fármacos
• Tabaco y café
• Gran parte de los alimentos animales.

6.   Bebe más agua

Las bebidas que no son agua o infusiones deshidratan el organismo. La mayoría de los problemas crónicos vienen precedidos de años de sequía corporal.

                El agua no solo es el 75% de nuestro cuerpo sino que forma parte del 80% de las células del cerebro lo cual es un factor importante porque influye en nuestra energía, estado de ánimo, ansiedad e incluso enfermedades de mayor relevancia

Algunas funciones que tiene son eliminar toxinas, acelerar el metabolismo, regular la temperatura, etc.

Una persona con falta de agua tendrá tendencia al sobrepeso, el cansancio crónico y la intoxicación por la falta de limpieza celular.

Los residuos celulares que van a aparar el sistema linfático solo se eliminan cuando hay suficiente agua para transportarlos y expulsarlos, pero si el sistema de limpieza está débil por fala de agua o exceso de basura celular los vasos linfáticos se van congestionando y el entorno celular de va volviendo cada vez más tóxico y el pH cada vez más ácido provocando problemas en algún órgano.

• Beber al menos dos litros de agua al día, agua pura y sin tratar en función del peso (50 kg/2l), la actividad física y la temperatura.
• También están indicadas las infusiones, pero no se considera agua el resto de líquidos como cafés, sopas, zumos, refrescos, cervezas etc.

¿Estás preparado para comerte el mundo?

Si tú eres de esas personas que está harta de vivir días grises y sin vida y deseas volver a sentirte pletóric@ desde por la mañana yo puedo ayudarte a que llenes cada día tu vida de color.

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