CÓMO SABER SI TU CUERPO ESTÁ EN ESTADO DE ALARMA.

¿Sabes escuchar a tu cuerpo?

¿Cuánto tiempo más vas a aguantar sin atender las súplicas y los mensajes que te manda?

¿Te has cansado ya de estar hinchada y con falta de vitalidad?

Si eres joven y te sientes mayor es momento de poner atención a esto

Contenidos 

Contenidos

  • Causas del estado de alarma.
    • Falta, escasez, desgaste de nutrientes
      • Ignorancia nutricional heredada
      • Señales de alerta.
      • Deshidratación
    • Intoxicación
  • Consecuencias de un organismo en estado de alarma
    • Por qué engordamos?
  • Tips para aprender a interpretar las señales del cuerpo

1. Causas del estado de alarma

El cuerpo es una fábrica inteligente que hace muy bien su trabajo si nosotros no le molestamos mucho, su trabajo es producir una serie de compuestos diarios que realiza gustosamente para que tengamos energía y podamos llevar a  cabo nuestro propósito en la vida. Pero con nuestras decisiones diarias le intoxicamos con comida procesada, malos pensamientos, infelicidad o le mantenemos en sequía y es entonces cuando recurre a medidas que no nos gustan con el fin de sobrevivir.

Cada vez que él interpreta que hay una situación que le provoca desequilibrios en su perfecta homeostasis (proceso por el cual logra mantener las condiciones internas favorables y estables para que pueda darse la vida)  se defiende como cualquier organismo vivo y eso es lo que nosotros etiquetamos a veces como dolencias.

Estas señales se manifiestan como estados de alarma para que nosotros solucionemos cuanto antes y de no hacerlo el cuerpo entra en escenarios más complejos como las enfermedades.

Nuestro equilibrio no sólo depende de factores físicos sino que afecta y depende de cada área de nuestra vida ya que cada pensamiento y emoción altera la química de nuestro cuerpo y nuestras creencias más profundas y nuestra percepción de nosotros mismos se refleja en nuestro cuerpo.

Dejando a un lado los motivos por los que perdemos el equilibrio cuerpo – mente, en un sentido eminentemente corporal, ponemos en jaque a nuestro cuerpo y lo que ocurre podemos resumirlo en 4 procesos principales ya que las demás se derivan de estos:

Resultado de imagen de cansancio

No le damos al cuerpo suficientes nutrientes:

Dietas:

la mayoría de las veces son restrictivas en calorías, o en nutrientes, solo a base de proteínas, solo a base de ejercicio, solo a base de lechuga… acaban con efectos rebotes por la pérdida de masa muscular, ansiedad, hambre, malhumor y metabolismo lento a causa de la falta de nutrientes

Las dietas quitan excesos pero no aportan los 114 nutrientes que son los que reparan, sanan, producen y evitan la muerte celular.

El intestino está sucio y no absorbe correctamente.

Alimentación con carencias y deficiencias nutricionales.

Ignorancia nutricional heredada

  • No sabemos qué nutrientes y que cantidad tiene cada alimento que ingerimos.
  • No sabemos la cantidad que necesitamos de cada uno diariamente.
  • Cuáles son los que necesita el cuerpo y cuáles no y en qué cantidades.
  • Heredamos las mismas costumbres nutricionales que nuestros padres y abuelos con las  mismas carencias y excesos que tenían porque comemos los mismos platos que ellos nos enseñaron y que vimos toda la vida en casa.
  • Comemos básicamente todas las semanas los mismos platos o menús que se reducen aproximadamente a no más de 20 con lo que resulta complicado incluir en ellos todo lo necesario.
  • No podemos saber el “contenido nutricional” de una persona hasta que no aparecen señales que nos den las pistas y algunos de ellos para que se den pueden pasar muchos años.
  • Las personas se medican con facilidad buscando el atajo fácil pensando que con ello erradican el problema pero lo único que consiguen es paliar esas señales que son las que nos avisan de que algo no va bien aunque sea mediante el dolor. Y es la única forma que tiene el cuerpo de arreglarlo así que sin señales el cuerpo esta incomunicado y no pone a funcionar sus sistemas de limpieza, defensa, farmacia etc.
  • La medicina trabaja para “arreglar” lo estropeado pero no va  a la raíz del problema que es la mala nutrición.
  • Los fármacos no reemplazan a los nutrientes.

¿Cuantas células tienen que morir para que un órgano falle?

Deshidratación 

Un descenso de tan sólo 2% del agua del cuerpo puede causar:

  • Estreñimiento
  • Facilita cólicos al riñón e infecciones de orina
  • Celulitis, mala circulación
  • Piel deshidratada
  • Pérdida momentánea de memoria, dificultad para pensar, aprender o razonar
  • problemas al enfocar la vista 
  • Cansancio a lo largo del día.
  • Dolor de cabeza, mareo
  • Intestino sucio por falta de agua para limpiarse lo que conlleva una intoxicación por residuos congestionados en tejidos, células y sistema digestivo

El cuerpo esta pasa por situaciones que le roban nutrientes.

  • El cuerpo cuando hace su trabajo genera basuras y residuos metabólicos como cualquier fábrica y es necesario eliminar todos esos fluidos y toxinas de manera eficiente. Si no ocurre eso el cuerpo recurre a enfermedades que es la forma que tiene de volver a su estado de salud. Para todo esto necesita nutrientes que le garanticen que cada célula hace bien su trabajo.

Consumo acelerado de nutrientes y muerte celular: 

  • Estimulantes como el café, tabaco, alcohol…, antibióticos, sedentarismo… todo esto desgasta e intoxica de forma masiva el organismo.
  • Mala circulación, falta de oxígeno, falta de antioxidantes…
  • Muchas horas sin comer: metabolismo lento.
  • Pérdidas de nutrientes: sudor, diarreas vómitos.

El cuerpo con el ánimo de volver a  la estabilidad y el equilibrio lo antes posible consume una gran cantidad de nutrientes pero en ese trabajo vuelve a generar residuos y basuras comenzando de nuevo el ciclo de limpieza y homeostasis que evidentemente nunca termina.

El cuerpo gasta más de los que le llegan

  • Mayor desgaste del organismo: Mayor destrucción de nutrientes
  • Estrés
  • Ejercicio
  • Malhumor
  • Dormir poco, desvelos, insomnio, trasnochos, etc… 

Todo esto destruye nutrientes, deberíamos tomar una mayor cantidad para que ese desgaste no tuviera más consecuencias

  • Aumento de las necesidades nutricionales:
  • Enfermedades.
  • Deporte
  • Convalecencia
  • Embarazos 
  • Personas en crecimiento o desarrollo.

En muchas ocasiones el cuerpo se defiende acumulando todos los nutrientes posibles si interpreta que recibe menos de los que necesita, así que reduce al mínimo su gasto energético, pierde lo menos posibles sudando poco, yendo menos veces al baño … y sobrevive con lo mínimo para construir  reservas alrededor del cuerpo, como los camellos hacen con el agua, por si acaso los necesitara en situaciones de precariedad. Esto es algo que me ocurrió a mi con el exceso de ejercicio y la falta de combustible, que no llegaba para hacer frente a esas demandas.

Intoxicación 

La intoxicación es la consecuencia de todos los procesos vistos anteriormente y que desemboca en un cuerpo con un pH ácido donde comienza el principio de la enfermedad. El cuerpo no es capaz de mantenerse limpio y en equilibrio y todos los sistemas se congestionan incapaces de dar abasto con tanto trabajo. Así que algunos órganos dejan de hacer su función para hacerse cargo de  misiones de emergencia como es preservar la vida manteniendo al cuerpo en estado de equilibrio. El cuerpo comienza entonces una crisis de toxicidad que nosotros llamamos, resfriados, gripes, infecciones y a medida que se va haciendo más y más tóxico desencadena en enfermedades crónicas a largo plazo.

La salud es consecuencia de mantener el cuerpo limpio.

Resultado de imagen de cuerpos enfermos

2. Consecuencias de un organismo en proceso de alarma.

Hambre:

Algunos motivos por los que podemos sentir sensación de hambre, que no deberíamos confundir con ansiedad:

  • Falta de nutrientes por desgaste, falta o por pasar por situaciones en las que necesitamos más de lo que nos llega, como vimos más arriba.
  • Falta de proteína.
  • Falta de agua.
  • Muchas horas sin comer.
  • Exceso de Carbohidratos con un índice de azúcar elevado como las patatas, arroz blanco, pan, pizza, pasta…cuanto más azúcar elevado es su índice de azúcar, menos nutrientes tiene el alimento y más rápido nos dará hambre después. (Índice Glucémico o de azúcar: un número que representa la velocidad con la que el azúcar del alimento se absorbe en sangre)
  • Exceso de grasa corporal o visceral. La grasa elevada se comporta como una especie de “alien” que come por sí mismo por eso si tenemos la grasa más alta tendremos más sensación de hambre continua.

Cansancio 

Ansiedad.

Somnolencia

El organismo al no disponer de suficiente material  para afrontar las tareas diarias empieza a dormir mal porque no consigue hacer el proceso de reconstrucción y reparación nocturna, así que por el día se queda dormido en cualquier sitio para evitar la pérdida de energía.

Delgadez

El cuerpo se acostumbra a no recibir nada y se empieza a devorar el mismo.

Irritabilidad y cambios de humor

La deficiencia de ciertas vitaminas ocasiona esto, pero lo confundimos con estrés. El estrés ya roba además nutrientes de forma masiva y acorta la vida celular.

Señales de desnutrición y alerta

  • Dolores de cabeza, jaquecas o migrañas
  • Caída del pelo, rotura de uñas o problemas de piel.
  • Varices o mala circulación
  • Deterioro de las funciones de algún órgano. (Avisos)
  • Estreñimiento o diarreas y gases
  • Problemas digestivos, ardores, malas digestiones, pesadez..
  • Retención de líquidos (malfuncionamiento del alcantarillado del cuerpo)
  • Insomnio.
  • Dolores articulares y musculares
  • Alergias, gripes y resfriados frecuentes
  • Cansancio continuo y falta de energía
  • Inflamación – dolor – fallo funcional.

Insomnio y desvelos nocturnos.

Enfermedades a largo plazo

Nos medicamos cada vez más intentando paliar los problemas que están ocasionando los propios medicamentos en el organismo. Nunca volvemos a recuperar la energía y la salud porque lo que necesita el cuerpo son nutrientes y solo tomamos drogas que nos calman los síntomas pero no la causa. 

Con el tiempo nos volvemos adictos a la medicación a sus efectos adictivos.

Sobrepeso y obesidad.

¿Por qué engordamos con tanta facilidad? 

Es necesario entender el razonamiento que hace el cuerpo a la hora de asegurar su supervivencia. Lo he relatado siguiendo un orden lógico y de forma sencilla para hacerlo entendible:

  • Paso 1: Hambre: por falta de nutrientes, exceso de azúcar, falta de proteína…o por cualquiera de las causas que ya vimos arriba.
  • Paso 2: Utilizo o pierdo más nutrientes de los que me llegan.
  • Paso 3: Retiene líquidos para evitar la pérdida de nutrientes ya que de ellos depende la vida de la célula. Deja de orinar y sudar pero al final para no intoxicarse pero en algún momento tiene que hacerlo, sin embargo, la grasa puede almacenarla durante toda la vida.
  • Paso 4: El cuerpo economiza el gasto de nutrientes  afectando a las enzimas, factores, etc…
  • Paso 5: Enlentecimiento del metabolismo, utiliza menos energía para metabolizar menos nutrientes
  • Paso 6: Quema menos grasa. Si la máquina tiene menos recursos, utiliza menos materia prima con lo que reduce el gasto de energía y el cuerpo quema menos calorías y por tanto menos grasa.
  • Paso 7: Al tener una maquinaria menos eficiente, todos los procesos metabólicos son más lentos favoreciendo así el sobrepeso y la obesidad.
Talla Extra, Mujer, Bikini, Guerrero

3. Tips para aprender a escuchar tu cuerpo

El organismo es una fábrica inteligente. Hay muchas maneras de ser consciente de que a nuestro cuerpo le está pasando algo pero sin duda la primera es cuando nos falta energía.

1. Acelera tu metabolismo

  • Come más veces en ingestas pequeñas para que la masa muscular trabaje de forma continua.
  • Bebe más agua
  • Haz algo de ejercicio cada día, lo que más te guste, pero muévete.

2. Mantén tu cuerpo limpio. Haz pruebas de causa – efecto: prueba fórmulas e ideas nuevas y observa cómo se comporta tu cuerpo. Por ejemplo:

  • Una semana sin comer harinas ni pan
  • Baja el consumo de lácteos y carnes
  • Toma al menos 3 litros de agua pura.
  • Vete antes a la cama y duerme al menos 7 horas.

3. Vigila tu estado de energía al levantarte. Los primeros pensamientos nada más levantarnos influyen enormemente en cómo va a ser nuestro día, sonríe aunque aparentemente no tengas motivos, cambia totalmente tu corporalidad. Compruébalo.

4. Toma un desayuno completo e hidrata tu intestino lo primero de todo.

5. Medita o pasa ratos en silencio: es importante desconectar la mente, hazlo durante 21 día y valora tus niveles de energía

6. Vigila tus pensamientos

  • Ya se sabe que las emociones influyen en nuestra química corporal, elige conscientemente cuales van a ser tus pensamientos del día.
  • Créate unas declaraciones o creencias que te empoderen y observa cómo tu cuerpo te habla.

7. Créate una imagen mental de cómo quieres verte en cuanto a salud

  • Peso, energía, entusiasmo, 

8. Observa y escucha los mensajes de tu cuerpo

  • Su energía, vitalidad, horarios, rutinas, comidas, qué le sienta bien, que no, qué le inflama, que cosas le bajan la energía vital… y luego haz un listado de aquellas que podrías mejorar.

Si tienes alguna duda puedes contactar conmigo haciendo CLIC AQUÍ o en el siguiente botón.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio